Dermatólogos y farmacéuticos presentan un decálogo de fotoprotección
El Consejo General de Colegios Oficiales de Farmacéuticos y la Academia Española de Dermatología y Venereología han hecho público un decálogo de fotoprotección para facilitar la información y formación de los usuarios y prevenir los efectos nocivos de una inadecuada exposición a las radiaciones solares.
A lo largo de las últimas dos décadas farmacéuticos y dermatólogos han contribuido a la educación sanitaria advirtiendo sobre los riesgos y concienciando a la población acerca de la necesidad de protegerse adecuadamente frente al sol. Ahora, continuando con esta labor, ambos colectivos quieren insistir en los mensajes, sobre todo cuando nuevos datos confirman los efectos nocivos de una inadecuada exposición al sol.
Los consejos que incluye el decálogo son los siguientes:
1. Proteja su piel, y en especial la de los niños, con fotoprotectores y ropa adecuada siempre que realice actividades al aire libre incluso en días nublados.
El riesgo de quemadura solar en días nublados podría ser incluso mayor, ya que no tenemos percepción del calor, y podríamos exponernos más tiempo al sol. En el caso de los niños se aconseja utilizar un fotoprotector específico para su edad.
2. Consulte a su farmacéutico y/o dermatólogo para seleccionar el fotoprotector adecuado y si presenta una patología cutánea acuda al dermatólogo.
El farmacéutico tendrá en cuenta la edad, el tipo de piel y la actividad que va a llevar a cabo en la selección del fotoprotector. Es importante utilizar un factor de protección solar y una textura adecuada. En pieles sensibles se recomienda elegir fotoprotectores sin conservantes, colorantes o perfumes, pues podrían dar lugar a fenómenos de alergia.
3. Aplique el fotoprotector al menos media hora antes de exponerse al sol.
De esta forma será absorbido por la piel y podrá ejercer sus efectos con el máximo de eficacia posible. Utilice una cantidad suficiente y no olvide zonas especiales como orejas, labios o los empeines de los pies.
4. No olvide proteger también sus ojos frente a la radiación solar.
Las gafas deben disponer de cristales homologados que reflejen la radiación ultravioleta.
5. Evite exponer al sol a los niños menores de 3 años.
Su piel es especialmente sensible a las radiaciones y los efectos perjudiciales se acumulan, por lo que los riesgos a largo plazo se incrementan en caso de haber sufrido quemaduras en la infancia.
6. Aplíquese el fotoprotector de forma periódica.
Es necesario hacerlo al menos cada dos horas y después de cada baño. Este tiempo podría ser menor en determinadas personas, como los niños, que suelen tener mayor actividad física y pasan más tiempo en el agua.
7. Evite actividades de riesgo, como la exposición al sol en las horas centrales del día o quedarse dormido al sol.
Durante las horas centrales del día, entre las 12.00 y las 16:00 horas, es cuando la incidencia de radiaciones solares es mayor.
8. Indique a su dermatólogo y/o farmacéutico los medicamentos que habitualmente utilice.
Algunos medicamentos pueden presentar riesgos asociados a la exposición solar, al provocar una posible reacción de fotosensibilidad.
9. Aplíquese crema hidratante sobre la piel tras la exposición al sol.
La radiación solar supone una agresión a la piel que puede favorecer su deshidratación, por lo que es aconsejable hidratarla una vez finalice la exposición al sol.
10. Una vez abierto, no conserve el fotoprotector de un año para otro.
La utilización de fotoprotectores en ambientes extremos de temperatura y humedad puede alterar sus propiedades, por lo que se recomienda no conservar un fotoprotector abierto de un año para otro.